Desplazamiento a Castellón

Con el horario definido para la décima jornada, varios miembros buscamos la posibilidad de poder desplazarnos hasta tierras levantinas. Nos pusimos mano a la obra para poder movilizar al mayor número de miembros en un día y sacar los pasajes lo más barato posible.

Todos partimos desde Gran Canaria el viernes por la noche pero en dos vuelos diferentes, algunos lo hicimos una hora antes que el resto de miembros, una vez llegamos a Madrid nos dirigimos los primeros expedicionarios al barrio madrileño del Pilar para pasar la noche lo mas caliente posible.



Sobre las 2:30 de la madrugada llegan los restantes miembros del grupo a esa zona, y se nos unen en el típico recorrido de bareto en bareto apurando hasta el cierre las bebidas.
Sobre las 5:40 nos dirigimos a la boca de metro más cercana para poner rumbo de nuevo a Barajas.

A las 7 de la mañana ya teníamos preparado los coches para salir rumbo a Castellón, haciendo una pequeña parada nada mas salir de la capital en un área de servicios para reponer fuerzas y no parar mas hasta llegar a nuestro destino. La mañana nos respeto y tuvimos un viaje tranquilo sin ningún tipo de problemas metereologicos, todo lo contrario que en la vuelta donde todo el tiempo estuvo lloviendo y con fuertes vientos.



Una vez llegamos a la pequeña ciudad levantina nos pusimos manos a la obra, buscamos donde poder dejar los coches y recorrer algo de sus calles, primeramente fuimos a su zona mas antiguo viendo algo de su cultura, una vez estuvimos todos los presentes nos sacamos la correspondiente foto de grupo con algún monumento de la ciudad, esta vez todo al ayuntamiento que estaba justo en una plaza con el mercado y la catedral.

Poco a poco se iba acercando el inicio del encuentro, la tarde cada vez era más oscura, después de almorzar en un céntrico restaurante italiano nos pusimos en marcha. Un pequeño corteo desde dicha zona hasta el estadio, yendo la mayoría de los miembros menos los conductores de los 3 coches que tuvieron que acercar los vehículos hasta la cercanía del estadio con todo el material de grada y la correspondientes botellas de arehucas para pasar la tarde lo mas animada posible.

Faltando unos 40 minutos para el inicio del encuentro cuando entramos al campo para colocar todo y dar ánimos a los nuestros desde el calentamiento. A la salida de la UD Las Palmas se hizo un pequeño tifo de estandartes de mano con el logo del grupo, acompañado con alguna camisa levantada.




La animación fue normal, muchos factores se dieron para no poder estar al 100 por 100, entre el frío, los kilómetros recorridos, las horas sin dormir y sobre todo por el mal juego desplegado por el equipo nos fue imposible dar más de lo que dimos.

Aun así estuvimos dando lo máximo y sin parar de alentar, al final de partido y con el sabor de una victoria con el empate en el descuento, recogimos todo y de vuelta hacia Madrid para poder coger el avión a primera hora de la mañana.